lunes, 12 de septiembre de 2016

DULCE NOMBRE DE MARÍA


"María. Oh nombre sagrado. Oh nombre digno de ser amado. Feliz el que lo repite a menudo con amor, quien lo saluda devotamente, quien lo reverencia sinceramente, quien lo invoca frecuentemente. Después del nombre de Jesús, nombre por encima de todo nombre, no hay ninguno más venerable, más dulce, más querido por todos los fieles. A la invocación de este nombre, el pecador se siente lleno de esperanza en la misericordia, el justo obtiene una mayor caridad, el que es tentado logra la victoria sobre sus pasiones, el que está afligido consigue la paciencia y el consuelo. Será, después del nombre de Jesús, mi recurso en las aflicciones, mi consejo en las dudas, mi fuerza en los combates, mi guía en el camino." (Abbé (D' Hérouville)).