Te damos gracias, Señor, por el año que
ha terminado,
ilumina, Señor, el que ahora iniciamos.
Te damos gracias, Señor, porque nos das
otra oportunidad,
haz que no te perdamos en ninguno de los
meses que vamos a vivir.
Te damos gracias, Señor, porque nos haces
instrumentos de tu paz,
que no olvidemos pedir tu ayuda cuando
asome el pesimismo.
Te damos gracias, Señor, porque Tú eres
el Dueño del tiempo,
que seamos relojes empujados y alentados
por tu mano.
Te bendecimos, Señor, porque conoces
nuestra vida pasada,
y te bendecimos, Señor, porque guiarás la
futura.
Te bendecimos, Señor, porque pasas o
detienes el calendario,
que vivamos con amor y fe todas y cada
una de sus jornadas.
Te bendecimos, Señor, porque Tú elaboras,
construyes y levantas,
que en estos próximos meses lo hagas
realidad a través de nuestras manos.
Te bendecimos, Señor, por tu Madre y
Madre nuestra, María,
que nos ayude a olvidar lo malo del año
precedente
y a prepararnos con amor de Madre, en el
presente y en el mañana.
¡Gracias, por la vida, Señor!