lunes, 6 de octubre de 2008
CORONA DE ROSAS ESPIRITUALES
La Iglesia dedica el mes de octubre a honrar a la Virgen María bajo la advocación del Rosario. La palabra Rosario significa “Corona de Rosas”. Al rezar un Ave María ofrecemos una hermosa rosa a la Santísima Virgen y cada Rosario completo hace una corona de rosas. El Santo Rosario es considerado como la oración perfecta porque junto con él esta aunada la majestuosa historia de nuestra salvación. Se trata de una oración simple, humilde como María.
La última aparición de la Virgen a Lucía, en Fátima, lo hizo como Nuestra Señora del Carmen sosteniendo el Santo Escapulario, que es el signo de consagración al Inmaculado Corazón de María. Por eso, la hermana carmelita Lucía, afirmó que la Virgen quería que el Escapulario fuera tomado como parte del mensaje y dijo: "ahora el Santo Padre lo ha afirmado así al mundo entero, diciendo que el Escapulario es signo de consagración al Inmaculado Corazón. (...). El Rosario y el Escapulario son inseparables".
"El Rosario concentra en sí
la profundidad de todo el mensaje del Evangelio
del cual es
como un compendio.
Con él,
los cristianos aprenden de María
a contemplar la belleza del rostro de Cristo
y a experimentar
la profundidad de su amor.
Mediante el Rosario,
el creyente obtiene abundantes gracias,
como recibiéndolas de las mismas manos
de la Madre del Redentor.
No he dejado pasar ocasión
de exhortar a todos
a rezar con frecuencia el Rosario".
Juan Pablo II
16 de octubre de 2002