"Teresa de Jesús es el alma más sublime que, después de la venida de Cristo, se halla revestido de carne humana"
Leibnitz
Santa Teresa conjugó a la perfección el ser gran escritora, llevando una vida "activa" tan intensa como "reformadora", y a la vez llevar una vida de alta contemplación, su secreto es la oración que siempre hizo y el enamoramiento de Jesucristo como la única mediación para llegar a Dios.
Su vida fue una continua búsqueda de la santidad, y su gran sueño fue reformar el Carmelo, en unión con San Juan de la Cruz, al que convenció para ponerse al frente de la reforma de la orden de los varones. Santa Teresa recorrió toda la geografía española fundando y reformando conventos, dejando su estela en todos ellos. El mismo General de la Orden Juan Bautista Rossi escribió de ella: "Doy infinitas gracias a la Divina Majestad de tanto favor concedido a esta religión por la diligencia y bondad de nuestra Rvda. Teresa de Jesús. Ella hace más provecho a la Orden que todos los frailes carmelitas de España ... ".
