Los apóstoles le dijeron al Señor: «Auméntanos la fe». El
Señor dijo: «Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera:
"Arráncate de raíz y plántate en el mar", y os obedecería. ¿Quién de
vosotros, si tiene un criado labrando o pastoreando, le dice cuando vuelve del
campo, "Enseguida, ven y ponte a la mesa?” ¿No le diréis más bien:
"Prepárame de cenar, cíñete y sírveme mientras como y bebo, y después
comerás y beberás tú"? ¿Acaso tenéis que estar agradecidos al criado
porque ha hecho lo mandado? Lo mismo vosotros: cuando hayáis hecho todo lo que
se os ha mandado, decid: "Somos
siervos inútiles, hemos hecho lo que teníamos que hacer"».
SEÑOR, efectivamente soy un pobre siervo cuando hago lo que debo, y un mal siervo cuando no lo hago. Ayúdame: que vea la vida con tus ojos y siga tus pasos haciendo el bien a los que necesitan que les eche una mano. Si mi fe fuera como un granito de mostaza.... Pero ni a eso llega. Por eso, hoy te pido con los apóstoles: ¡Auméntame la fe! Así podré ser testigo de tu Evangelio ante quienes no te conocen.