miércoles, 1 de abril de 2009

NUNCA SE PUEDE LEGITIMAR LA MUERTE DE UN INOCENTE ( II )

“El ser humano debe ser respetado y tratado como persona desde el instante de su concepción y, por eso, a partir de ese mismo momento se le deben reconocer los derechos de la persona, principalmente el derecho inviolable de todo ser humano inocente a la vida”. (Juan Pablo II, Evangelium vitae, 60).


La Vicaria Episcopal para la Acción Pastoral y el Apostolado Seglar ha emitido un comunicado ante la posible aprobación de la ley del aborto de plazos, que se puede leer íntegro pinchando aquí.