sábado, 11 de abril de 2009

TIEMPO DE ESPERA


Tu misión ya terminada,
tu cuerpo, inerte, reposa
en una terrible losa,
mas esto no es el final;
es ahora que comienza
a cumplirse la promesa
que le hiciste a Abrahán.

Somos tu pueblo elegido,
por nosotros has sufrido
y con tu muerte nos das
la esperanza de habitar
por los siglos de los siglos,
quedando el dolor vencido
y la muerte, por igual.

Ahora espero gozosa
que de esa fría losa,
Jesús, resucitarás;
y al igual que Magdalena,
te buscaré donde sea
hasta que te pueda hallar,
y viviré siempre unida
al que por mí dio su vida,
sin separarme jamás.

Mª Luz Corominas