lunes, 19 de abril de 2010

GRACIAS SEÑOR POR D. GINÉS (I)



Gracias, Señor, porque haber compartido con D. Ginés algunos años de nuestra vida ha supuesto para todos un encuentro contigo, pues, acaso como a los discípulos de Emaus ¿no arde nuestro corazón y no sentimos una emoción especial cada vez que se acerca a nosotros, o nos trasmite su palabra que siempre apunta a la tuya, palabra transmisora del amor de Dios? Y es que para quien su vida es Cristo, es Cristo mismo quien vive en él y así lo hace presente en medio de la comunidad.

No contar con su presencia, aunque recompensada por nuestros sacerdotes, buenos, fieles e íntegros supone para nosotros un sacrificio que te ofrecemos a modo de oración cada día por él; acógela Señor Jesús, para que siempre fiel a Ti, a ejemplo del Buen Pastor,guíe a la Iglesia por el sendero que lleva a la santidad, y que la Santísima Virgen del Carmen le conforte en los momentos de debilidad, sea su amparo, y cubriéndolo con su Santo Escapulario le bendiga y proteja siempre.